miércoles, 8 de octubre de 2008
Sombras
Apuré el paso para conseguir el encuadre. No fuí consciente en ese momento, cuando sacaba la foto, de que la sombra de ella se tapaba la cara con su brazo, sombra también, para protegerse del sol (¡¿).
Dana, a pesar de la sordera, tiene buena vista si lo que tiene que ver está a menos de dos o tres metros. Hace muchos años que es la sombra de Jose y pasean, ahora con correa, por donde siempre. Caminos conocidos por el olfato, entre sombras.
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Ya dije que eres El Señor de las Sombras. Aunque por lo que veo aun resistes la luz del sol. Sé que te gustan los ajos y eso me tranquiliza.
ResponderEliminarHay en las dos fotos un cierto desvalimiento. La señora ajena al monstruo que se cierne sobre ella. El perro que mira sin ver, que pone toda su fe en las formas que el olfato recrea a partir del material de su memoria.
Hoy no miraré detrás de mi, por si las moscas. Seguiré palpando, como de costumbre.
(Genial entrada. Qué gran combinación de imágenes y sugerencias. Hay quien lo llama poesía)
La sombra es el sentido de la luz.
ResponderEliminarMe gusta pasearme por este pueblo y ahora conocer a alguien más... me gusta su caminar. Sombra, la sombra siempre nos acompaña, pero que no siempre la comprendemos.Y el buen animalito, tan atento, sabiendo que es el protagonista de ese momento. La vida es tan sencilla...tan llena de belleza para quien sabe mirar :)
ResponderEliminarUn abrazo
Haideé, si te pasas por mi pueblo quizá me veas por ahí, siempre cámara en mano, y habrá que tomar un café. Siempre es agradable hablar de fotografía.
ResponderEliminarXuan, es un regocijo interior el imaginarse poseedor del título que me das y ser maaalo.
El tacto es el sentido del órgano más grande de una persona. Palpa, con lo que fuere, no vaya a ser que miremos atrás y lo que veamos sea al monstruo que llevamos dentro.
Jose, el sentido de la luz a mí se me antoja, corto que soy, como el sentido de la vida...indescifrable.
Las distancias enrojecen tus fotos
ResponderEliminary arden en ellas mis colores,
como tus ojos vencidos por el viento.
Gracias por este blog tan auténtico,y a tus amigos blogeros...que me han traido hasta aquí..
Un abrazo