Aunque ya iba por la mitad, ésta era la tercera vez que la veía.
La primera vez fué un regalo de XuanRata, como un caballo de troya con una plantita dentro. Sería inútil explicar todo lo que me hace sentir el verla, pero esta última vez me han vuelto a impresionar muchas cosas.
Una de ellas sucede mientras Hadjii, uno de los niños protagonistas de este reportaje, vuela desde la India hacia Europa invitado por la World Press Photo, aunque mi memoria bien puede traicionarme y confundir nombres, sociedades y hasta la forma de escribirlos.
Hadjii demuestra tener una sensibilidad muy especial a la hora de sacar fotos, aunque sea con una rudimentaria cámara de carrete, de ésas que nos regalaban por un revelado. Todo llama su atención.
Ya en el avión mira por la ventanilla, pregunta si se puede abrir y el cámara nos enseña lo que puede ver: El ala del avión, uno de los motores y un mar de nubes ocupando todo lo demás. Mientras su mano busca la cámara dice: '¡Vaya! Esto parece una foto'. Y sin pensárselo mucho... dispara.
Mis fotos ya no tienen gente y éso es un mal síntoma.
Sólo me quedan las fotos de los viernes. Por eso son las que más me gustan, aunque no tenga permiso para enseñarlas.
Y todo gracias a 'Los Niños del Barrio Rojo', ...y por culpa de XuanRata.
Lo que nunca ha cambiado es lo que pienso desde siempre, desde antes de los niños, mientras mi mano busca la cámara...
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ResponderEliminarGracias por la terapia de los viernes, Xuan, aunque a tí no te sirva de mucho.
ResponderEliminarMe serviría más si enseñara menos (todavía menos) y aprendiera más (de ellos). Y para que el que quiera sepa de qué estamos hablando, aquí va el enlace para contemplar los trabajos de nuestros aventajadísimos alumnos:
ResponderEliminarhttp://aulastic.com/blogs/sanfotix2009/
Y en cuanto a tus fotos, puede que últimamente no tengan mucha gente pero es que amigo, tus objetos hablan.