martes, 23 de septiembre de 2008
Escaleras
Cualquier escalera merece, al menos, un par de fotos, si es con gente...cientos. Tengo muchas fotos de estas escaleras, y de muchas otras, pero raro es el día que no intento sacar otra más, distinta. Vamos, que podría hacer un blog sólo con fotos de ellas.
Es lo que tienen para mí, parece que entras en un trozo de realidad donde la física responde a otras medidas, aunque también sean como la vida misma. La particular forma de moverse de cada uno es exageradamente evidente dentro de unas escaleras y éso hay que aprovecharlo.
Lo que para Axel es una rampa de lanzamiento, hasta el infinito y más allá, para Noah es un brillante tobogán que desciende hacia la madre de todas las aventuras.
Compartir trayecto con estos dos 'calamares' alivia la pequeña tortura que, para mí, supone cada peldaño.
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Cierto que como al caminar, cada uno tiene su cadencia al subir las escaleras... buen contraluz y el movimiento, que habla de nuevo de la energía que te transmiten esos "calamares" :)
ResponderEliminarGracias por invitarme a este espacio, y gracias por tus palabras y visita.
Espero que la subida sea cada vez menos enojosa para ti.
Un abrazo
Dos imágenes con unos juegos de luces muy buenos y con los contrastes de ideas que las unen.
ResponderEliminarDel encuadre, no digo nada, sigo pensando que estas son las fotos que más te representan.
Un gran abrazo p.
Estoy contigo y con la pasión de las escaleras. Yo subo y bajo unas diariamente que hace tiempo me robvaron el coraón. Será cuestión de retratarlas. El simbolismo que desprenden las escaleras no lo consigue nadie/nada más.
ResponderEliminarMe gustan ,mucho las dos fotos especialmente la de arriba, preciaosa luz y el reflejo que provocva en la pared. Practicamente parece un angel.
Oye, lo del blog de las escaleras es para pensárselo. Un reto muy interesante. Plantéatelo.
ResponderEliminarLas escaleras, como las puertas, como las ventanas, como todos los lugares de tránsito, como todos los sitios-bisagra, esos no-lugares, son espacio en movimiento y de esa naturaleza contradictoria extraen su fuerza.